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Esta es la interfaz que utilizarán Xbox Series X y Xbox Series S

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Xbox Series X y Xbox Series S

Microsoft ha mostrado, por fin, la interfaz que utilizarán Xbox Series X y Xbox Series S, y ha confirmado que dicha interfaz estará presente también en la actual generación de consolas, Xbox One y Xbox One X, e incluso en el cliente de Game Pass para PC. Esto quiere decir, como habréis podido imaginar, que se trata de una interfaz unificada y diseñada para cubrir todo el ecosistema de productos y servicios Xbox.

Lo primero que vemos en el vídeo que muestra la futura interfaz de Xbox Series X y Xbox Series S, y del resto de productos y servicios asociados a Xbox, es una explicación de las claves que han inspirado a los responsables del proyecto a adoptar este particular diseño. Crear una interfaz de usuario obliga a entender al tipo de usuario que apuesta por tu consola, y también a prestar mucha atención y cuidado a los detalles.

El gigante de Redmond ha querido, con esta nueva interfaz, que el usuario tenga claro lo que ofrecen Xbox Series X y Xbox Series S, y que este pueda disfrutar de todas sus posibilidades de una manera sencilla e intuitiva. Obvia decir que, para conseguirlo, una de las claves más importantes es hacer que los usuarios puedan acceder a sus juegos casi al instante. Para conseguirlo, Microsoft ha apostado por la tecnología Xbox Velocity, que consigue reducir los tiempos de carga de inicio (arranque de la consola) hasta en un 15%, y acelera la carga de juegos, tanto al iniciarlos como al retomarlos desde la «home».

Os recuerdo que la arquitectura Xbox Velocity será exclusiva de Xbox Series X y Xbox Series S, ya que esta recurre al SSD de ambas consolas y a su enorme ancho de banda (2,4 GB/s). Es imposible llegar a ese nivel con el HDD de 5.400 RPM que integran Xbox One y Xbox One X.

Xbox Series X y Xbox Series S

La nueva interfaz aprovecha el potencial de Xbox Series X y Xbox Series S

Como podemos ver en el vídeo la interfaz también ha recibido un importante lavado de cara. La verdad es que me gusta, el diseño es sencillo, minimalista y limpio. Tenemos nuestro catálogo de juegos convertido en el centro de todo, y el resto de elementos juegan un papel secundario. A pesar de ello, de ese carácter «secundario» de algunos elementos, Microsoft ha sabido mantenerlos al alcance del usuario. Tenemos todo lo que necesitamos a mano para que podamos acceder, sin esfuerzo, a cualquier función o característica de la consola, incluyendo el lado social de la misma y la tienda.

La optimización también ha jugado un papel muy importante. La interfaz de Xbox Series X y Xbox Series S consume menos recursos, y esto tiene una razón de ser: que los desarrolladores tengan a su disposición una mayor cantidad de memoria GDDR6 y de núcleos de la CPU. Según Microsoft, Xbox Series X tendrá 13,5 GB de memoria y 7 núcleos (y 14 hilos) libres de un total de 16 GB y 8 núcleos (y 16 hilos). Como hemos dicho en otras ocasiones, la interfaz y las aplicaciones básicas consumen recursos.

Como no podía ser de otra forma, la compañía de Redmond también ha reforzado el lado social en esta nueva interfaz, y ha simplificado el proceso de grabación de nuestros momentos favoritos en juegos y las vías a través de las cuales podemos compartir esas grabaciones con nuestros amigos. Sin duda un buen trabajo por parte de Microsoft.

Al final del vídeo Microsoft reitera que esta interfaz no será exclusiva de Xbox Series X y Xbox Series S, sino que llegará a todo el ecosistema Xbox, incluyendo tanto el Game Pass para PC como la aplicación para smartphones. Cabe esperar que su lanzamiento se produzca a finales de año (noviembre, probablemente), coincidiendo con la llegada de ambas consolas de nueva generación.

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