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Xbox Scarlett y PS5: características, precio y lanzamiento, te contamos todo lo que sabemos

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Microsoft y Sony llevan varios años inmersos en el desarrollo de Xbox Scarlett y PS5. No es un secreto, ambas compañías han confirmado de una manera más o menos explícita que hay nuevo hardware en camino, aunque es cierto que al principio las informaciones que teníamos eran poco claras.

Dábamos por hecho que Xbox Scarlett y PS5 iban mantener la base de las consolas anteriores, es decir, la arquitectura x86 y el sistema de memoria unificada bajo un único bus, pero teníamos dudas sobre los componentes que iban a elegir Microsoft y Sony para potenciar ambas consolas.

Es comprensible, ya que aunque los diseños de una nueva generación se empiezan a planificar cuando la generación anterior se encuentra en la recta final de su ciclo de vida lo normal es sentar solo unas bases que, al final, se irán puliendo con la elección de componentes semi-personalizados que irán llegando en esos últimos años.

En el caso de Xbox Scarlett y PS5 supimos, gracias a AMD, que ambas consolas iban a repetir componentes del gigante de Sunnyvale. La alianza entre ésta, Sony y Microsoft es un hecho, pero esto no aclara qué componentes exactos van a utilizar ambas consolas, una cuestión que, poco a poco, hemos podido ir cuadrando gracias a las fechas estimadas de lanzamiento y al portafolio de productos que tiene previsto AMD para esas fechas.

No es la primera vez que hablamos de las posibles características y del precio y la fecha de lanzamiento de Xbox Scarlett y PS5, pero en este artículo queremos unificar toda la información y todas las claves que hemos podido reunir durante los últimos meses y organizarlas de forma ordenada y clara para que tengáis una visión resumida y «definitiva» de ambas consolas.

Al no ser información confirmada oficialmente siempre cabe la posibilidad de que haya algunos cambios, pero de producirse a estas alturas está claro que serían cambios menores, es decir, que no afectarían a los tres componentes clave de ambas consolas: procesador, GPU y memoria unificada.

Xbox Scarlett: especificaciones, precio y fecha de lanzamiento

Según las últimas informaciones que hemos visto la consola de nueva generación de Microsoft llegará al mercado en dos grandes versiones, diferenciadas por la potencia de la GPU y la cantidad de memoria unificada.

Este planteamiento puede sonar un poco extraño, pero la verdad es que tiene sentido, sobre todo si pensamos en lo que ha ocurrido en la generación actual con Xbox One y Xbox One X. Lanzar dos consolas de nueva generación con una base común que permita hacer que ambas reciban los mismos juegos y diferenciarlas por la posibilidad de moverlos en resoluciones superiores es un movimiento inteligente, ya que Microsoft podría posicionarlas en rangos de precio distintos y orientarlas a usuarios diferenciados no solo en función de su presupuesto, sino también de sus exigencias.

Así, la versión más potente de Xbox Scarlett, conocida provisionalmente como Xbox Anaconda, sería un modelo pensado para jugar de forma óptima en resoluciones 4K manteniendo 60 FPS, mientras que la versión menos potente, que responde al nombre de Xbox Lockhart, tendría una potencia sensiblemente inferior a nivel gráfico, lo que la colocaría como una opción dirigida a mover juegos en 1080p manteniendo sin problemas 60 FPS.

Sé lo que estáis pensando, Xbox One X y PS4 Pro ya pueden mover juegos en 4K a 30 FPS y en 1080p a 60 FPS en algunos casos, ¿donde está la mejora entonces? Es una buena pregunta, ya que afectan a Xbox Scarlett y PS5. Es importante tener en cuenta una serie de claves que vamos a resumir a continuación para evitar que podáis confundiros:

  • Xbox One X yPS4 Pro recurren con mucha frecuencia al reescalado y no renderizan siempre en 4K nativo.
  • Mover juegos en 4K a 30 FPS y 4K y 60 FPS representa un salto muy grande.
  • Los juegos de próxima generación tendrán un mayor grado de realismo en general. Esto incluye no solo el aspecto gráfico, sino también las animaciones, las físicas y la amplitud de los mundos, mejoras que, obviamente, representarán un mayor consumo de recursos.
  • Conseguir 60 FPS en juegos es un reto enorme para las consolas actuales, más grande incluso que llegar a resolución 4K, y la razón está en su CPU. Montan un procesador Jaguar, cuyo rendimiento bruto (IPC) está a la altura de un Intel Atom.

A todo esto debemos unir, además, las ventajas que traerá el uso de unidades SSD en las consolas de nueva generación: instalación de juegos y actualizaciones mucho más rápida y tiempos de carga reducidos.

Bien, ahora que tenemos todo esto claro podemos profundizar en las que serán a grandes rasgos, las especificaciones de las dos versiones de Xbox Scarlett:

Xbox Scarlett Anaconda

  • Procesador Ryzen basado en Zen 2 con 8 núcleos y 16 hilos.
  • 16 GB de GDDR6 unificada a 14 GHz.
  • Bus de 256 bits.
  • GPU Radeon Navi con una potencia de 12 TFLOPs (rendimiento similar a una GTX 1080-Radeon RX Vega 64).
  • SSD de 1 TB NVMe (1 GB/s).

Este modelo estaría  pensado para jugar, como dijimos, en 4K con 60 FPS. Su precio podría rondar los 600 dólares-euros.

Xbox Scarlett Lockhart

  • Procesador Ryzen basado en Zen 2 con 8 núcleos y 16 hilos.
  • 12 GB de GDDR6 unificada a 12 GHz.
  • Bus de 256 bits.
  • GPU Radeon Navi con una potencia de 4 TFLOPs (rendimiento similar a una GTX 1060-Radeon RX 480).
  • SSD de 1 TB NVMe (1 GB/s).

En este caso la resolución objetivo sería 1080p con una tasa estable de 60 FPS, una meta perfectamente posible gracias al salto que supone el uso de un procesador Zen 2 frente a la arquitectura Jaguar. Su precio debería rondar los 400 dólares-euros.

Por lo que respecta a la fecha de lanzamiento todo parece indicar que Microsoft será la primera en lanzarse a la piscina. Esto quiere decir que Xbox Scarlett y PS5 no llegarán al mismo tiempo, de hecho la primera podría ser anunciada a mediados de este año y debutar entre finales de 2019 y mediados de 2020.

PS5: especificaciones, precio y fecha de lanzamiento

Pasamos ahora a hablar de la consola de próxima generación de Sony. A diferencia de lo que hemos comentado sobre la anterior de momento todo parece indicar que solo veremos una versión de PS5, aunque es importante tener en cuenta que esto no quiere decir que la compañía nipona no pueda repetir la estrategia que hemos visto en la generación actual, es decir, que lance primero dicha consola y que más adelante lleve a cabo una renovación parcial lanzando una PS5 Pro.

Xbox Scarlett y PS5 mantendrán la arquitectura x86 y tendrán, además, una configuración muy similar. Según las últimas informaciones que hemos podido ver PS5 estará equipada con las siguientes especificaciones:

  • Procesador Ryzen basado en Zen 2 con 8 núcleos y 16 hilos.
  • 16 GB de GDDR6 unificada a 14 GHz.
  • Bus de 256 bits.
  • GPU Radeon Navi con una potencia similar a las GTX 1080-Radeon RX Vega 64.
  • Unidad de almacenamiento SSD sin concretar.

Con esa configuración sería posible jugar en resoluciones 4K y mantener 60 FPS estables. Su anuncio oficial se espera para finales de 2019 o principios de 2020, y su lanzamiento debería producirse entre mediados y finales de 2020. El precio será también de unos 600 dólares-euros, aproximadamente.

El parecido entre ambas consolas a nivel de hardware es evidente, y además comprensible. Ya vimos en la generación actual que tanto Xbox One como PS4 tenían muchas cosas en común: arquitectura de memoria unificada, CPU AMD Jaguar y GPU Radeon, aunque con pequeñas diferencias que al final acabaron haciendo que la segunda fuera un poco más potente que la primera.

Xbox Scarlett y PS5 no se limitarán a repetir lo que vimos en la generación actual, sino que irán un paso más allá. Al final las diferencias a nivel de potencia entre ambas consolas deberían ser mínimas, lo que significa que los juegos exclusivos tendrán un peso aún mayor a la hora de determinar al gran vencedor de esta nueva generación de consolas.

¿Un salto generacional menor? Otras cosas a tener en cuenta

El lanzamiento de PS4 y Xbox One marcó un importante punto de inflexión en el sector de las consolas de videojuegos. Ambas abandonaron el uso de componentes totalmente personalizados y ajenos al mundo del PC para optar por una configuración más «mundana» que gira alrededor de los componentes semi-personalizados.

Ya hemos hablado de ello en ocasiones anteriores, y las consecuencias que esto ha tenido han sido evidentes: ambas consolas se han visto agotadas a nivel de hardware de una manera muy temprana, lo que obligó a Sony y a Microsoft a lanzar PS4 Pro y Xbox One X. Ambas consolas pudieron dar un salto importante a nivel de potencia gráfica, pero tuvieron que mantener la misma base a nivel de CPU para evitar problemas a nivel de desarrollo y para mantener una experiencia de uso unificada.

Esto supuso una especie de renovación intergeneracional parcial que ha contribuido a difuminar la línea que separará a Xbox One y PS4 y sus versiones mejoradas, Xbox One X y PS4 Pro, de Xbox Scarlett y PS5. En efecto, el salto generacional que viviremos en 2020 con la llegada de las nuevas consolas de Sony y Microsoft será evidente, pero mucho menos marcado que el que vivimos  por ejemplo con la llegada de Xbox 360 y PS3.

Personalmente creo que en términos generales nos encontraremos ante una evolución superior a la que vimos con la llegada de PS4 y Xbox One, sobre todo por las posibilidades que plantea el uso de una CPU Ryzen de última generación en términos de física y animaciones, y por el potencial que dará a los desarrolladores disponer de una mayor cantidad de memoria unificada para crear mundos más amplios, más ricos y más complejos.

Si ponemos todo esto en relación con los juegos de la próxima generación la conclusión es clara: los títulos tipo sandbox seguirán siendo una mayoría, pero tendremos desarrollos menos lineales y mundos más abiertos. En efecto, habrá mejoras en calidad gráfica en sentido amplio, pero los cambios más marcados vendrán dados por esos dos componentes: CPU y memoria.

Antes de terminar quiero hacer un apunte importante. Hace un tiempo surgieron rumores de que Xbox Scarlett y PS5 podría trabajar con trazado de rayos y contar con su propio sistema de suavizado de bordes apoyado por inteligencia artificial. Suena extraño, pero los chicos de A4 Games, responsables de Metro Exodus, confirmaron que es posible emular el trazado de rayos vía software, así que es una idea que poco a poco ha ido ganando peso.

De momento no hay nada confirmado, pero sabemos por fuentes totalmente fiables que desde el punto de vista técnico sería posible, y además la propia AMD ha comentado que trabaja en una alternativa viable a la tecnología DLSS de NVIDIA. Dado que las consolas siempre suelen gozar de una optimización mucho más profunda y de kits de desarrollo especiales que permiten un aprovechamiento pleno de sus recursos es posible que nos acabemos llevando una sorpresa.

Con todo, de momento es mejor mantener una actitud escéptica en este sentido y esperar a tener confirmación oficial.

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