40 años de Microsoft Flight Simulator

A muchos, me consta, nos parece que fue ayer la primera vez que nos pusimos a los mandos en Microsoft Flight Simulator pero, al pensarlo, resulta que más que un día, lo que han pasado es un buen puñado de primaveras. Y es algo que se nota al primer vistazo… al simulador, quiero decir, porque nosotros, en el espejo, estamos igualitos que hace esa pila de años, puede que incluso con un toque más interesante… aunque siento decir que, en general, en eso nos gana de calle el simulador de vuelo de Microsoft.

Y es que durante estos días estamos celebrando los 40 años de Microsoft Flight Simulator, cuya primera versión llego al mercado a finales del ya bastante lejano 1982. En este punto es importante, eso sí, introducir un matiz, y es que me refiero a la franquicia del simulador desde que empezó a ser desarrollado y distribuido por Microsoft, pero debemos recordar que sus orígenes se encuentran en el Flight Simulator creado por SubLOGIC en 1979 y que, tres años después, pasó a ser propiedad de los de Redmond.

Durante estos 40 años, Microsoft Flight Simulator ha pasado por fases de lo más variadas, desde ser uno de los productos punteros de Microsoft hasta a haber llegado a lo que, aparentemente, era el final de su ciclo de vida, tras la publicación de Flight Simulator X, allá por 2006. En aquel momento Microsoft anunció su final, pero años más tarde, en 2012, decidió recuperarlo, con el nombre Microsoft Flight, si bien con un planteamiento bastante más lúdico y, por ende, menos realista, que no terminó de gustar a nadie.

Dos años después, en 2014, se publicó Flight Simulator X: Steam Edition, una edición del Microsoft Flight Simulator X de 2006 que además llegó acompañada de la promesa de que la franquicia sería recuperada. Y así es como, finalmente, llegamos a 2020 y al debut de Microsoft Flight Simulator, la actual e impresionante resurrección del veterano título, pero esta vez totalmente fiel a su origen y con tantas, tantísimas mejoras a todos los niveles, que público y crítica no dudan en calificarlo como uno de los mejores juegos de Microsoft en toda su historia. Y sí, es mejorable, desde luego, pero ya desde el mismo punto de partida, pudimos comprobar que la apuesta es muy, muy seria.

Microsoft Studios y Asobo se están mostrando volcados en Microsoft Flight Simulator, y es que desde su publicación no han dejado de llegar más y más actualizaciones. algunas de la cuales se dedican a pulir su funcionamiento y mejorar su rendimiento, mientras que otras añaden nuevos aeropuertos, mapas, aeronaves, etcétera. Desde poder disfrutar de la Península Ibérica como nunca, hasta ponerte a los mandos de un flamante F-18 como si fueras el mismísimo Maverick en la nueva entrega de Top Gun, si se trata de volar, todo vale.

Obviamente la efeméride no podía pasar desapercibida en el título y, en consecuencia, ya tenemos una nueva actualización de Microsoft Flight Simulator, dedicada a sus 40 años. ¿Y qué encontraremos en la misma? Esto es lo que enumera la compañía:

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• Un avión de pasajeros real, el Airbus A310-300.
• Siete aviones históricos de renombre: el Wright Flyer de 1903, el Curtiss JN-4 Jenny de 1915, el Ryan NYP Spirit of St. Louis de 1927, el Douglas DC-3 de 1935, el hermoso Grumman G-21 Goose de 1937, el Havilland DHC-2 Beaver de 1947 y el famoso Hughes H-4 Hercules «Spruce Goose» de 1947, el mayor hidroavión y avión de madera jamás construido.
• Cuatro aeropuertos clásicos, incluido el Meigs Field de Chicago, un aeropuerto tradicional de la franquicia Microsoft Flight Simulator.
• La edición del 40.º aniversario también incluye helicópteros y planeadores que se comportan con un realismo muy vivo.«

Esta actualización, como todas las anteriores, es totalmente gratuita para quienes ya tienen el juego y, si eres de los que prefieren jugarlo a través de Xbox Cloud, debes saber que la actualización también ha llegado ya al servicio de juego en la nube de Microsoft, por lo que también podrás disfrutarla allí.

Personalmente, estoy emocionado por la llegada de los clásicos citados en la lista de novedades, especialmente del Douglas DC-3, una aeronave de la que estoy enamorado desde hace décadas (una ocasión estuve a punto de volar en uno, pero el mal tiempo lo impidió). ¿Y qué decir de la nueva versión de Meigs Field? Cualquier persona que haya sido usuaria de Flight Simulator, y especialmente de las versiones menos recientes, ha hecho rodar las ruedas de su Cessna (o de su Boeing) en esa pista, que es historia dentro de la historia.