El batacazo de GameStop confirma la nueva era del videojuego

Las acciones de GameStop se desplomaron un 26% después de que el minorista de videojuegos eliminase su dividendo trimestral e informara de una caída del 13,3% en los ingresos del primer trimestre.

GameStop es un buen termómetro para analizar la marcha de la primera industria mundial del entretenimiento y los enormes cambios que se están produciendo en ella. El gran minorista en venta, alquiler e intercambio de videojuegos, consolas y accesorios, se encuentra en un punto crítico, con valor de la acción reducida a niveles de 2005.

Los ingresos del minorista volvieron a caer con fuerza en el primer trimestre, incluso por debajo de las estimaciones de los analistas. Aunque explicó la eliminación de dividendos en la «búsqueda de flexibilidad para impulsar la creación de valor para los accionistas, trasformación de futuro, reducción de la deuda e inversión a través de mejores actividades de contratación, precios y promoción», la medida no ha gustado a los inversores y confirma las dudas que plantea su modelo de negocio basado en los formatos físicos.

Hace dos meses, la compañía nombró al veterano de la industria minorista, George Sherman como director ejecutivo, su quinto CEO en poco más de un año, y la semana pasada nombró a James Bell como director financiero. Tienen trabajo por delante.

La nueva era del videojuego

Las ventas de productos de segunda mano en GameStop, uno de sus negocios distintivos, cayeron un 20,3% en el trimestre. El aumento del contenido descargable que no se puede revender, en una apuesta global por los formatos digitales que parece imparable, está detrás de estos resultados que se vienen repitiendo de trimestres anteriores.

Es algo que hemos visto antes en otros segmentos de mercado, cuando la distribución digital finalmente alcanza un punto de inflexión que hace que los negocios que anteriormente eran sólidos se vuelvan irrelevantes. Tower Records se declaró en bancarrota en 2006 después de décadas como líder del mercado en música. Borders cerró en 2011 liquidando cientos de tiendas a medida que crecía la competencia en línea y de libros electrónicos. Hay ejemplos por doquier. Los minoristas de juegos basados en un modelo de negocio de formatos físicos pueden estar llegando a un punto de inflexión similar.

Las ventas de hardware en GameStop se desplomaron aún más, un 35%. En este caso se achaca a que los consumidores están esperando a la nueva generación de consolas. Sin embargo, este apartado también va a seguir cayendo en el futuro si se confirma que las nuevas PS5 y Xbox Scarlett serán las últimas tal y como las hemos ido conociendo.

Aquí llegamos a los métodos de distribución que están impulsando la nueva era del videojuego. La nube y el streaming pueden ser la puntilla para las tiendas clásicas. Ya decíamos que es una pena para los que las hemos usado desde hace muchos años, nos gusta tenerlos entre las manos, revenderlos, cambiarlos o coleccionarlos, pero la industria tecnológica no para y la tendencia parece imparable.