Crisis del sector: último parte

Nortel y Motorola son las últimas empresas tecnológicas en reconocer serios problemas. La primera acaba de reconocer que está en bancarrota y la segunda que tiene que despedir a 4.000 empleados. Nortel tiene una deuda de 107 millones de dólares que es incapaz de financiar y Motorola ha hecho un cierre del año horrible que ha pasado factura en la acción. Malos tiempos para las Tecnológicas en este arranque de 2009.

El gigante de las comunicaciones canadiense Nortel, ha reconocido entrar el el proceso de declararse en bancarrota por ser incapaz de encontrar ayuda financiera para respaldar la deuda de 107 millones de dólares de intereses que mantiene. El CEO de la compañía, Mike Zafirovski, reconoce en una carta y un vídeo colgado en la web oficial de Nortel, que han solicitado la protección de acreedores en Canadá, Estados Unidos y Europa, con objeto de planificar la reestructuración de la compañía.

Mike pide tranquilidad a clientes, empleados, accionistas y acreedores pero no aporta ningún dato más. Nortel es el mayor fabricante de equipos de telecomunicaciones en Norteamérica. Fundada en 1895, tiene una plantilla de 26.000 empleados que pronto, desgraciadamente, empezará a adelgazar. Sus principales clientes son las operadoras telefónicas.

Por su parte, Motorola sigue reestructurando su plantilla. Según afirma Boeing, este año saldrán de la firma del murciélago unos 4.000 empleados. Un cierre del año catastrófico es el culpable de tal decisión. La realidad es que la empresa necesita algún teléfono killer, como el famoso Startac, que le permita volver al ruedo de primera división en terminales. La larga espera de un móvil basado en Android -la clara apuesta de la compañía en la gama alta- está enfriando el ambiente.

En fin, este es el último parte de guerra de una situación que está ahogando al sector tecnológico. Si la semana pasada hablábamos de la situación de Dell o Lenovo, hoy le toca el turno a Motorola y Nortel. ¿Quién será el próximo?