Cinco mitos sobre la conexión WiFi que probablemente no conocías

El WiFi juega un papel fundamental en nuestras vidas. Hoy por hoy es imposible imaginar nuestro día a día sin esa red inalámbrica que nos permite conectar smartphones, portátiles y prácticamente cualquier dispositivo a Internet sin tener que recurrir al cableado.

Su importancia y su popularidad están fuera de toda duda. Casi todo el mundo sabe explicar, con mayor o menor acierto, qué es el WiFi y qué ofrece, pero todavía se mantiene un desconocimiento notable en algunos aspectos concretos que hoy vamos intentar aclarar a través de cinco grandes mitos relacionados con este tipo de conexión inalámbrica.

Esperamos que os guste y os invitamos a dejar cualquier duda en los comentarios. Sin más empezamos.

1.-El WiFi tiene efectos nocivos sobre la salud

Es uno de los mitos más extendidos y también de los más aceptados, pero es totalmente falso. Las ondas que utiliza este tipo de conexión inalámbrica son de baja frecuencia y la radiación que emiten los routers es de tipo «no-ionizante», lo que significa que no producen efectos nocivos sobre los seres vivos.

Los estudios que se han realizado durante las últimas tres décadas confirman que no hay ningún tipo de vinculación entre las conexiones WiFi y el desarrollo de diversas patologías, incluido el cáncer, así que no debemos preocuparnos.

2.-Es muy fácil romper una red WiFi

Con esto nos referimos a romper la seguridad de la misma y acceder a ella para «robar Internet» a la víctima. Es un mito y por tanto es falso, aunque con matices, ya que una conexión que mantenga los ajustes de fábrica puede ser un blanco fácil para los cibercriminales.

Las contraseñas y nombres de red utilizadas de fábrica suelen estar recogidas en grandes listas filtradas en Internet y se utilizan para lanzar ataques de fuerza bruta. Un simple cambio de nombre de red y de contraseña puede servir para proteger de forma efectiva nuestra red WiFi.

3.-Los obstáculos son lo más importante

Existe la creencia de que los muros y las puertas cerradas son el único problema importante que puede afectar al alcance y a la calidad de la señal de una red WiFi. Es obvio que ambos elementos pueden afectar negativamente a una conexión inalámbrica, pero no son los únicos.

Las interferencias producidas por otros electrodomésticos e incluso por otras redes WiFi pueden afectar de forma grave a nuestra conexión, así que debemos tenerlo muy en cuenta. Por ello es importante cuidar la colocación del router, utilizar canales poco saturados y aprovechar la banda de 5 GHz.

4.-El Bluetooth no interfiere con el WiFi

Es falso. El Bluetooth trabaja en la banda de 2,4 GHz, la misma que utiliza el estándar tradicional 802.11n, así que se pueden producir interferencias que afecten negativamente a la conexión, un problema que por suerte hoy es fácil de superar.

Para evitar cualquier posible interferencia basta con recurrir a la banda de 5 GHz. Cambiar los canales del router y estar más cerca de éste también puede ayudar.

5.-La compatibilidad con estándares antiguos es perfecta

Esto no es del todo cierto. Es verdad que podemos utilizar dispositivos basados en estándares como el 802.11n y el 802.11g sin problemas de compatibilidad, pero en éste último caso podríamos experimentar problemas de rendimiento que afectarán a toda la red WiFi.

Sabemos que no es habitual encontrar hogares que mantengan dispositivos basados en el estándar 802.11g, pero es un dato que debemos tener en cuenta.

Contenido ofrecido por AVM FRIZ!