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Cinco ventajas de las particiones de disco

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particiones de disco

Las particiones de disco son las denominaciones que reciben la división de las unidades de almacenamiento en un ordenador personal. Y tiene sus ventajas.

El uso de particiones «troceando» virtualmente un disco duro o SSD (o varios de ellos o RAIDs) es una buena manera de clasificarlos en varios «discos lógicos», cada uno con su propio sistema de archivos y que el sistema operativo maneja de manera independiente.

En sistemas Windows, las particiones están identificadas con una letra seguida por dos puntos. En otros sistemas como Linux y UNIX, es común emplear directamente varias particiones para archivos, datos de usuario y para memoria virtual temporal.

Cuando compramos un ordenador nuevo lo más probable es que tenga una sola partición “C:” que ocupa todo el espacio del disco. Algunos fabricantes añaden pequeñas particiones para recuperación del sistema y otras pero que no están destinadas al manejo del usuario.

Puedes revisar las que tienes instaladas a través de “Mi PC”, el explorador de archivos o a través del administrador de discos que es precisamente donde se pueden crear o gestionar estas particiones. También se incluyen -en su caso- letras de unidades adicionales para discos ópticos, ubicaciones de red o medios de almacenamiento extraíbles, cuyas unidades se van creando a medida que las insertamos en el equipo.

Ventajas en el uso de múltiples particiones de disco

Las particiones son usadas habitualmente por usuarios medios y avanzados pero son un aspecto bastante desconocido para el gran público. Algunas razones poderosas que aconsejan su uso son:

  1. Instalar varios sistemas operativos. La mayoría de sistemas operativos obliga a instalarlos en sus propias particiones primarias. En este escenario, contar con varias particiones separadas es obligatorio. Además, puedes crear terceras particiones para compartir archivos entre los distintos sistemas si usan distintos sistemas de archivos.
  2. Salvaguardar tus datos en caso de fallos del sistema. Si el sistema operativo falla por cualquier causa (controladores, aplicaciones o virus) es probable que no puedas acceder a la unidad ni realizar una restauración del mismo. Contar al menos con dos particiones, una para el sistema y otra para los datos, te asegura que un fallo del sistema no afectará a tus archivos personales. De la misma manera, si tenemos que volver a instalar desde cero el sistema operativo, solo tendremos que formatear su partición, manteniendo a salvo las particiones adicionales que tengamos creadas para nuestras copias de seguridad y archivos personales.
  3. Rendimiento mejorado. Los grandes discos duros actuales (6, 8 o 10 TB) ofrecen una enorme capacidad de almacenamiento pero obligan a las cabezas lectoras a un mayor recorrido. Con ello, dividir el disco en varias particiones te asegura un menor retraso en el reposicionamiento de los datos y un mejor rendimiento. No es elevado, pero todo suma.
  4. Mejor mantenimiento. Contar con varias particiones facilita el mantenimiento del disco duro, la comprobación de errores o la optimización y desfragmentación de las unidades. También acelera la búsqueda de los archivos.
  5. Mayor facilidad en la organización. Contar con varias particiones de disco facilita la organización personal. En la imagen de arriba, verás como el sistema de almacenamiento está dividido en la partición C: para el sistema, D: para instalación de aplicaciones y juegos, y E: para copias de seguridad, documentos, fotos, música o vídeo. Las posibilidades son casi ilimitadas y mejoran la organización frente a una única partición.

Cómo gestionar las particiones de disco

Todos los sistemas operativos ofrecen herramientas nativas propias para gestionarlas y terceros desarrolladores ofrecen aplicaciones comerciales avanzadas. En Windows, su gestión se realiza a través del “Panel de control-Herramientas administrativas-Administración de equipos-Administración de discos”:

particiones de disco

Sus posibilidades van desde la creación de particiones adicionales (siempre que contemos con el suficiente espacio); reducir el tamaño de cada una de ellas para hacerlo posible; formatearlas; cambiar la letra de acceso y ruta a la unidad o formatearla para una limpieza completa:

particiones de disco

Es una herramienta avanzada en la que se debe conocer exactamente lo que se pretende realizar antes de tocar nada para que su gestión no termine en desastre, pero como hemos visto su uso facilita la seguridad de datos, el mantenimiento, el rendimiento y la organización de los archivos en las unidades de almacenamiento de nuestro ordenador personal.

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