Conecta con nosotros

Noticias

Windows 10 bloqueará las «aplicaciones potencialmente no deseadas» de forma predeterminada

Publicado

el

Windows 10 aplicaciones

Microsoft ha anunciado un cambio importante en el comportamiento de Windows 10 (y seguramente Windows 11) frente a las denominadas «aplicaciones potencialmente no deseadas» (PUA por sus siglas en inglés), definidas como aquellas de mala reputación que pueden causar comportamientos inesperados en el sistema.

Si hasta la configuración de este tipo de aplicaciones estaba desactivada, a partir de este mes «para que te resulte más fácil mantener un rendimiento óptimo de tus sistemas», dice Microsoft, vendrá activada de manera predeterminada en Windows 10, tanto por el servicio de seguridad Microsoft Defender como por el navegador web Microsoft Edge. No obstante, los usuarios podrán modificar este comportamiento.

Microsoft explica el cambio en la página de soporte: «las aplicaciones potencialmente no deseadas (PUA) son una categoría de software que puede hacer que su dispositivo funcione con lentitud, muestre anuncios inesperados o, en el peor de los casos, instale otro software que puede ser más dañino o molesto. PUA no es malware, pero es un software que a menudo no necesitas y probablemente no quieres»

¿Qué se considera como «aplicaciones potencialmente no deseadas» y quién decide cuáles son? Microsoft tiene fijado unos criterios para que su servicio de seguridad clasifique este tipo de aplicaciones e incluye desde software publicitario al de criptominería, pasando por el que intenta activamente evadir la detección de los productos de seguridad. También incluye otros como clientes .torrent aunque éstos solo lo suele aplicar en versiones empresariales y en general los que tienen «mala reputación en la industria«.

Obviamente, dentro de todos estos grupos pueden incluirse una buena cantidad de software legítimo que detectado por Defender sería bloqueado. Y nosotros que probamos muchas aplicaciones podemos asegurar que así sucede.

Para estos casos y aunque este tipo de software esté bloqueado por defecto, los usuarios podrán modificar la gestión de este tipo de software en «Configuración > Actualización y seguridad > Seguridad de Windows > Control de aplicaciones y navegador». Ahí verás un apartado específico de «protección basada en reputación» donde se puede gestionar la gestión de Defender, Edge y la Microsoft Store.

Windows 10 aplicaciones

Microsoft debería dar ejemplo y ‘limpiar’ Windows 10

Llevamos décadas clamando en el desierto sobre la necesidad de liberar Windows de Bloatware. Y Android, que para esto es igual o peor. Si la misma Microsoft define las PAU como «software que puede hacer que su dispositivo funcione con lentitud, muestre anuncios inesperados o software que a menudo no necesitas y probablemente no quieras», debería dar ejemplo con las copias de Windows que entrega, plena de software basura

A las aplicaciones y servicios habituales de Windows (que no son pocos y no todos necesarios), Microsoft ha añadido en Windows 10 otro montón de aplicaciones universales para la interfaz Modern UI, además de aplicaciones de terceros y juegos que nada tienen que ver con lo que podríamos considerar necesario para el funcionamiento del sistema operativo.

Y si compras un PC nuevo tienes que sumar las propias de los fabricantes. Como las de Microsoft, la inmensa mayoría son poco útiles (por decirlo suavemente) y entre todas penalizan la experiencia del usuario, el rendimiento del equipo y su estabilidad. O hasta comprometen gravísimamente la seguridad como vimos en el caso Superfish de Lenovo, un apartado de la seguridad que Microsoft dice querer reforzar bloqueando por defecto las aplicaciones potencialmente no deseadas.

Sería más respetuoso con el cliente ofrecer todo ese tipo de software (el de Microsoft y el de los fabricantes) como una descarga adicional, independiente y transparente. Si estás tan harto como nosotros de software basura, puedes revisar esta guía para eliminar el Bloatware de Windows 10 donde incluimos la limpieza tanto con funciones internas del sistema como con aplicaciones de terceros. E insistimos: un sistema operativo limpio mejoraría la experiencia del usuario, el rendimiento de los equipos y probablemente su grado de adopción.

Lo más leído