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Las GeForce RTX serie 30 mejorarán en gran medida el rendimiento y la eficiencia
NVIDIA utilizará la arquitectura Ampere en su próxima generación de tarjetas gráficas, conocidas, de momento, como GeForce RTX serie 30. Será la sucesora de Turing, una arquitectura que marcó una evolución importante gracias a la introducción del hardware dedicado a trazado de rayos y a la llegada de los núcleos tensor para aprovechar el potencial de la inteligencia artificial aplicada a juegos, pero que, sin embargo, no cumplió con las expectativas que generó en términos de potencia bruta y de eficiencia.
La llegada de las RTX 20 serie Super generó un cierto malestar, ya que esa renovación de gama ofrecía el salto en términos de rendimiento que debería haber representado Turing desde el principio. No hablamos sin motivo, La RTX 2070 Super tiene un rendimiento similar al que ofrece la GTX 1080 Ti, un avance que encaja con lo que vimos con la llegada de la GTX 1070, que superó a la GTX 980 Ti. Ese es solo un ejemplo, podríamos poner muchos más.
Polémicas a un lado, ahora que tenemos toda la serie RTX 20 actualizada está claro que Turing ya se encuentra en su etapa final y que la llegada de Ampere está cada vez más cerca. Según las últimas informaciones podríamos ver una presentación de la arquitectura durante el primer trimestre de este año, y el lanzamiento de las primeras GeForce RTX serie 30 se producirá durante el segundo semestre de 2020.
Se había puesto en duda el salto al proceso de 7 nm, pero es poco probable que NVIDIA decida reutilizar el proceso de 12 nm que hemos visto en Turing. Esto le impediría ofrecer un aumento de rendimiento notable sin renunciar a una mejora de eficiencia significativa, y con el grado de maduración que ha alcanzado TSMC utilizando dicho proceso directamente no tiene sentido.
Podemos dar prácticamente por sentado que las GeForce RTX serie 30 utilizarán el proceso de fabricación de 7 nm, una evolución notable frente a los 12 nm que utilizan las RTX serie 20. Este cambio permitirá una mejora de eficiencia muy marcada, y gracias a las novedades que traerá Ampere a nivel de arquitectura también veremos una mejora muy interesante en términos de rendimiento. Esas mejoras se dividen en tres puntos clave:
- Cambios en los motores de sombreado y de geometría.
- Una mayor cantidad de memoria gráfica en todas las gamas.
- Mejoras en los motores de trazado de rayos y de inteligencia artificial.
Si ponemos todo esto en conjunto y lo unimos al aumento habitual de frecuencias de trabajo a nivel GPU que se produce con cada nueva generación (se espera que ronde entre los 100-200 MHz con Ampere) podemos esperar un aumento de rendimiento de entre un 30% y un 50% frente a Turing, una mejora muy grande que vendría acompañada, además, de una reducción importante del consumo energético.
En el mejor de los casos Ampere puede marcar una mejora de rendimiento del 50% y una reducción del consumo también del 50%, siempre hablando de forma comparativa frente a Turing. Hace unos días compartimos con vosotros un artículo dedicado a repasar las posibles especificaciones de las GeForce RTX serie 30, así que os invito a echarle un vistazo.
Más información: Taipei Times.
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