El Galaxy S21 no integrará la cámara en la pantalla, vemos por qué

La presentación de los Galaxy Note 20 nos ha llevado a poner la mirada en los Galaxy S21, la próxima generación de smartphones tope de gama que Samsung anunciará durante el primer trimestre de 2021, concretamente entre principios y mediados del mes de febrero, salvo sorpresa de última hora.

El Galaxy S21 ha generado una gran expectación no solo porque podría traer un importante renovación en términos de diseño, sino porque además podría ser el primer smartphone de la compañía surcoreana en contar con una cámara frontal integrada en la pantalla. Suena bien, ¿verdad? Esto permitiría crear un acabado todo pantalla casi absoluto, ya que se eliminaría por completo el espacio reservado a dicho componente, la clásica isleta flotante, y solo tendríamos unos bordes muy contenidos. Si Samsung utiliza, además, el acabado Edge esos bordes acabarían siendo mínimos.

Sabemos que la integración de la cámara frontal en la pantalla de un smartphone es posible. Oppo ya mostró prototipos de smartphones totalmente funcionales con este tipo de cámaras, pero la calidad de imagen que presentan es muy limitada, y todo parece indicar que todavía no ha mejorado lo suficiente como para que sea realmente viable en terminales tope de gama.

Galaxy S21 con cámara integrada en la pantalla: demasiados sacrificios

Creo que no hay mejor forma de describirlo, esa es la idea que nos da Ross Young, asesor en DSCC (Display Supply Chain Consultants). En su opinión la utilización de una cámara frontal integrada en la pantalla del Galaxy S21 sería una mala idea porque implicaría un sacrificio importante en términos de calidad de imagen, y también por todo lo que supondría en materia de costes y de suministro.

El suministro de los componentes necesarios para montar smartphones con cámara integrada en la pantalla es muy bajo, y al mismo tiempo es muy caro. Estamos ante dos problemas que se aprecian con una claridad absoluta, y es que Samsung tendría que asumir una subida de los costes de fabricación del Galaxy S21, y exponerse a una posible escasez de componentes.

Obvia decir que se trata de un riesgo que, desde luego, no vale la pena correr, y por ello creemos que tiene todo el sentido del mundo pensar que Samsung no va a utilizar una cámara integrada en la pantalla en los Galaxy S21.

Con todo, si esta tecnología avanza como está previsto y se introducen las mejoras necesarias para aumentar la calidad de imagen, reducir los costes y optimizar la producción es probable que la veamos en los Galaxy S22, cuya llegada se producirá en 2022.