Crecen (y evolucionan) los tipos de estafa a través de WhatsApp
Los servicios de mensajería instantánea para móvil, como WhatsApp y compañía, han revolucionado el modo en el que nos comunicamos. Al sumar la practicidad de la mensajería instantánea que tanto se popularizó en PC a principios de siglo a la conectividad permanente que proporcionan los teléfonos móviles, y añadiendo las constantes mejoras que éstos experimentan, obtenemos como resultado la opción preferida cada día por más usuarios para la mayoría de sus comunicaciones.
El problema es que no todo el mundo los emplea con buenas intenciones. Durante las últimas semanas, por ejemplo, se ha popularizado un tipo de engaño que, si eres usuario de Twitter, seguro que has visto. El estafador remite un mensaje a un número cualquiera (de una persona que no lo conoce, eso sí), haciéndose pasar por una persona cercana pero sin identificarse y que se encuentra muy lejos, físicamente, invitando a la víctima a que intente averiguar de quién se trata.
En los casos que podemos ver en Twitter se han popularizado las respuestas de broma, para tomar el pelo al estafador, pero aquellos casos en los que la víctima cree identificar a alguien (pariente, amigo, etcétera) que vive fuera del país, el estafador adopta inmediatamente esa identidad para, a continuación, decirle a la víctima que quería darle una sorpresa viniendo a España (o al país en el que se encuentre la víctima), pero que ha tenido un problema en el aeropuerto.
A partir de ahí, ya puedes imaginar, una historia un tanto rocambolesca que desemboca, como no, en la necesidad de enviar una cantidad de dinero a un destinatario determinado. El estafado recibirá, en teoría, unos bultos facturados por el estafador que contienen teléfonos móviles, portátiles, cámaras digitales… todo de última generación, por supuesto, y con un valor muy superior al de la cantidad de dinero a enviar.
El popular y siempre divertido youtuber y streamer Rimembah recibió ese mensaje y decidió documentar, con su inconfundible estilo, el intento de estafa de principio a fin. Un vídeo que, más allá de la primera y evidente lectura humorística, documenta paso a paso, el procedimiento empleado por estos estafadores. Sin duda alguna es un vídeo cuyo visionado me parece más que recomendable
Que este tipo de estafas ganen visibilidad es, siempre, positivo, puesto que incrementa las posibilidades de que las potenciales víctimas ya tengan conocimiento de la misma y, por lo tanto, no caigan en ella.
El problema es que esta estafa en concreto es de las más conocidas, pero no es la única. Hay otra que ya lleva cierto tiempo circulando y sobre la que conviene estar alertados y, claro, prevenir sobre ellas a nuestros círculos, con especial énfasis en las personas mayores que cuenten con menos nivel de competencias digitales, pues son los principales objetivos de este tipo de ataques. Este es otro de los principales problemas de la brecha digital.
Hace solo unas horas, el músico Piter G publicaba un hilo en Twitter, en el que documenta con imágenes reales (al menos en teoría) un intento de estafa a través de WhatsApp, de nuevo empleando la suplantación de identidad, si bien en este caso dando una identificación indirecta y parcial, esperando que la otra parte, la víctima, caiga en la trampa e identifique al estafador como la persona que pretende ser.
A partir de ese punto de nuevo, y como ya puedes imaginar, una historia de enredo para lograr que la víctima envíe dinero al estafador.