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¿Se salvará Palm?

El CEO de Palm, Jon Rubinsten, fue uno de los máximos responsables de la creación del iPod, el producto más vendido de su gama en la última década. Hace unos años pasó a dirigir Palm, una empresa que está pasando por malos momentos. A pesar del lanzamiento del novedoso sistema operativo webOS para sus nuevos smartphones, las ventas no están respondiendo a lo esperado y la empresa está tratando de impulsar sus soluciones frente a las de sus competidores en un mercado demasiado competitivo.

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El CEO de Palm, Jon Rubinsten, fue uno de los máximos responsables de la creación del iPod, el producto más vendido de su gama en la última década. Hace unos años pasó a dirigir Palm, una empresa que está pasando por malos momentos. A pesar del lanzamiento del novedoso sistema operativo webOS para sus nuevos smartphones, las ventas no están respondiendo a lo esperado y la empresa está tratando de impulsar sus soluciones frente a las de sus competidores en un mercado demasiado competitivo. 

 

Como indican en DailyTech, Rubinstein parece optimista a pesar de todo. En una entrevista con Fortune, el CEO de Palm explicaba que «está claro que nos hemos encontrado con un obstáculo, no hay duda. Es decepcionante, y también frustrante. Pero la empresa dispone de recursos tremendos. Tenemos un gran equipo que hemos construido en los últimos dos años. Hay que recordar que esto fue una historia total de transformación. No era como si cogiéramos algo que estaba funcionando y que no dirigimos bien«.

 

 

Según Rubinstein, ellos «tomaron una empresa que no tenía futuro y la han estado transformando. Tenemos el que es probablemente el mejor sistema operativo móvil del mercado. Es claramente el más fácil de usar y el que tiene la interfaz más intuitiva«. Sin embargo, como él mismo comenta, aún está en pleno desarrollo, y también les falta el apoyo de los desarrolladores.

 

Lo que está claro es que Jon Rubinstein tiene ya experiencia a la hora de salvar a empresas que pasaban por dificultades: ya hizo algo parecido en Apple cuando ayudó en el desarrollo del iPod, y ahora pretende hacer lo mismo con Palm, aunque parece que en este caso lo tiene especialmente complicado, tal y como comentamos en un profundo análisis realizado hace poco en MuyComputer.

 

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