Intel Alder Lake-P y U: Un vistazo técnico a la apuesta de Intel para el sector portátil

El pasado 4 de enero se produjo la presentación de los procesadores Intel Alder Lake serie H, serie P y serie U. La diferenciación de cada una de esas series por letras era, como os contamos en su momento, algo muy importante, ya que representa la especialización de cada una de ellas en un aspecto concreto. Así, la serie H se centra en ofrecer el máximo rendimiento posible, la serie P busca un mayor equilibrio entre rendimiento y movilidad, y la serie U prioriza la movilidad.

Hace apenas unos días tuve la oportunidad de probar un portátil basado en el procesador Intel Core i9-12900H, un chip que se encuadra dentro de la gama de alto rendimiento, y como os contamos en nuestro análisis del ASUS ROG Strix SCAR G17, su rendimiento era simplemente fantástico, tanto en monohilo como en multihilo. No hay duda de que Intel ha hecho un excelente trabajo con Alder Lake, y que también ha acertado a la hora de trasladar su diseño híbrido al sector portátil.

La semana pasada tuvimos la oportunidad de acceder a un evento especial celebrado por Intel. Dicho evento estuvo centrado en las series Intel Alder Lake-P y Alder Lake-U que, como anticipamos, tienen enfoques muy distintos a los de la serie H. Gracias a dicho evento pudimos conocer todas sus claves y acceder a información muy interesante, y hoy por fin podemos compartir todos los detalles con vosotros.

Intel Alder Lake-P y U: Potencia sin compromisos

Los procesadores Intel Alder Lake-P y U mantienen todos los valores clave con los que el gigante del chip ha marcado la diferencia, incluyendo tanto el diseño híbrido, con núcleos de alto rendimiento y núcleos de alta eficiencia, y también el soporte de estándares de última generación, como la memoria LPDDR5. La serie Intel Alder Lake-P tiene un encapsulado idéntico al de los modelos de la serie H, pero reduce el TDP de los 45 a los 28 vatios, lo que permite su integración en equipos más ligeros y compactos.

Por su parte, los procesadores Intel Alder Lake-U estarán disponibles en dos versiones, una configurada con un TDP máximo de 15 vatios y otra con un TDP de solo 9 vatios. Como podemos ver en la imagen adjunta, el tamaño de sus encapsulados será inferior, algo que, unido a sus bajos consumos energéticos, harán posible su utilización para fabricar portátiles muy ligeros, delgados y compactos. También se podrán utilizar para crear nuevos diseños y factores de forma.

Los procesadores Intel Alder Lake-P prometen mejorar el rendimiento hasta en un 70%, están dirigidos a aquellos usuarios que quieren disfrutar de lo mejor de los dos mundos, es decir, de un alto nivel de potencia, una plataforma de última generación y un buen rendimiento gráfico sin tener que renunciar, por ello, a diseños ultraportátiles más ligeros y delgados. En la imagen que encontraréis justo debajo de estas líneas podéis ver la distribución de elementos que forman un procesador Intel Alder Lake-P. Sí, son tantos que sería más justo llamarlo «SoC» directamente.

En su versión más potente, un chip Alder Lake-P integra una configuración de 6 núcleos de alto rendimiento, basados en la arquitectura Golden Cove, y 8 núcleos de alta eficiencia, basados en la arquitectura Gracemont, lo que nos deja un total de 14 núcleos y 20 hilos. El trabajo de coordinación de esos núcleos lo realiza el sistema Intel Thread Director. La GPU integrada utiliza la arquitectura Xe y puede contar con hasta 96 unidades de ejecución. Por lo demás, podemos destacar el soporte de memorias DDR4-DDR5 y LPDDR4-LPDDR5, así como la compatibilidad con el estándar Wi-Fi 6E.

La imagen que encontraréis justo encima de estas líneas nos muestra todas las claves de los procesadores Intel Alder Lake-U en sus dos variantes, una con TDP de 15 vatios que tiene un encapsulado de 50 x 25 x 1,3 mm, y otra de 9 vatios cuyo encapsulado es más pequeño (28,5 x 19 x 1,1 mm). Ambas versiones presentan diferencias notables, pero vemos que lo importante se mantiene incluso en la versión de 9 vatios, que es compatible con memorias LPDDR4 y LPDDR5, admite dos conectores Thuderbolt 4 y viene con Wi-Fi 6E.

Estos procesadores vendrán con configuraciones de hasta 2 núcleos de alto rendimiento y 8 núcleos de alta eficiencia, lo que se traduce en un máximo de 10 núcleos y 12 hilos, una cifra impresionante teniendo en cuenta que hablamos de chips con un TDP de entre 9 y 15 vatios, y que estos vienen, además, acompañados de una solución gráfica de última generación.

En las dos imágenes que os dejo justo encima de estas líneas podéis ver las características de los diferentes modelos que tiene previsto lanzar el gigante del chip dentro de sus series Intel Alder Lake-P y U, incluyendo los Pentium y Celeron, que tendrán una configuración muy curiosa: 1 núcleo de alto rendimiento y 4 núcleos de alta eficiencia, sin HyperThreading. Estas recogen todos sus detalles técnicos, incluyendo la cantidad de unidades de ejecución que trae la GPU de cada modelo, sus consumos tanto en modo normal como en modo turbo, las cantidades de caché y las velocidades de trabajo que pueden alcanzar.

La siguiente imagen nos muestra un resumen con todas las claves que integra la nueva plataforma que utilizan los procesadores Intel Alder Lake-P y U. Como podemos ver, tenemos todo lo necesario para disfrutar de una experiencia óptima y de nueva generación. Esto confirma, una vez más, que Intel ha sabido crear valor yendo más allá del rendimiento bruto. Podemos destacar especialmente el soporte de Wi-Fi 6E, que ya hemos citado anteriormente, el 5G, los conectores Thunderbolt 4 y las tecnologías de mejora de la imagen en videollamadas.

La siguiente imagen es también muy interesante. En ella tenemos un resumen con los puntos clave que busca garantizar la plataforma Evo de tercera generación:

• Colaboración más inteligente.
• Una respuesta más consistente.
• Más de 8 horas de autonomía real.
• Recuperación en menos de un segundo desde el modo de suspensión.
• Recarga rápida: al menos 4 horas de autonomía con solo 30 minutos de carga.

Rendimiento de los Intel Alder Lake-P y U

Pasamos ahora a hablar del rendimiento de los nuevos procesadores Intel Alder Lake-P y U. La primera gráfica nos muestra esa mejora de hasta el 70% de rendimiento en multihilo a la que hicimos referencia anteriormente, y en las otras gráficas podemos ver resultados más concretos en diferentes aplicaciones, lo que nos permite hacernos una idea muy clara del salto que representan, frente a las generaciones anteriores, estos nuevos procesadores.

En la última imagen tenemos varias pruebas de rendimiento en juegos utilizando la GPU Intel Iris Xe que integran los nuevos procesadores Intel Alder Lake-P, y no hay duda de que los resultados son muy buenos, tanto que confirman que podremos utilizar dichas soluciones integradas para jugar con garantías en 1080p. Os recuerdo que podéis ampliar todas las imágenes haciendo clic en ellas.

Mis conclusiones, tras analizar toda esta información, son muy claras. Los procesadores Intel Alder Lake-P se perfilan, sin duda, como una opción muy interesante para aquellos que quieran disfrutar de un alto nivel de rendimiento y de un buen grado de movilidad y de autonomía, mientras que los procesadores Intel Alder Lake-U son ideales para los que necesitan priorizar la movilidad, aunque no quieren renunciar por ello a un buen rendimiento, ni a las ventajas de una plataforma de última generación.