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Análisis

Audi A5 Coupé, suerte

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Can you help me occupy my brain? Black Sabbath (Paranoid, 1970)

Karl subió con dificultad a su veterano Audi 100 1.8 GL impedido por el grueso abrigo y por sus setentayseis años de existencia. Se desprendió de los guantes que dejó sobre el asiento del acompañante pero no del voluminoso gorro que le obligaba a agachar la cabeza. A continuación giró la llave entornando los ojos. Como siempre desde hacía cuarentaycinco años y a pesar del frío y la humedad de la Selva Negra el motor cobró vida y los cilindros empezaron a girar engrasados y dispuestos calentándose con parsimonia pero irrevocables y una sonrisa igualmente inevitable se dibujó abriéndose camino en la poblada barba de Klaus. Se echó hacia atrás en el asiento mientras vigilaba el indicador de la temperatura del motor. Junto al coche esperaba pacientemenre su esposa Helga, aún más abrigada que él, con los brazos cruzados. Poco a poco Karl se fue desprendiendo del gorro y del grueso abrigo a medida que la temperatura del coche convertía al habitáculo en habitable. Finalmente bajó laboriosamente la ventanilla y sacó el brazo izquierdo para agitar la mano despidiéndose de Helga y ella le devolvió el saludo antes de meterse a toda prisa en la pequeña casa de tejado de madera de abeto. Karl condujo durante apenas veinte minutos de forma cuidadosa por las carreteras nevadas que conocía al dedillo mientras la ira de la reina de la noche sonaba demasiado alta en el viejo estéreo del coche.

Pronto llegó a casa de su hijo frente a la cuál esperaba Lukas, su nieto, en compañía de su madre. Esta atusó el gorro del niño y se despidió con la mano de Karl para meterse también rápidamente en su casa. Abrió la puerta y su nieto tomó asiento con cara de pocos amigos. «Abuelo, tu coche hace ruido y apesta. ¿Por qué hace tanto ruido? El coche de papá no hace ningún ruido.» Dijo a modo de saludo. Karl sonrió en vez de enfadarse. «¿Sabes Lukas? He recorrido durante años estas carreteras ejerciendo de médico y muchas veces he tenido que conducir con niebla o bajo una espesa nevada y este coche apestoso…» dijo mientras con la mano derecha golpeaba cariñosamente el salpicadero, «este coche apestoso me ha acompañado siempre. Y ese ruido insoportable para mi era como un murmullo tranquilizador que me decía «no te preocupes Karl volveremos a casa, te llevaré de vuelta con tu mujer» o «no te preocupes Karl, llegaremos a tiempo para atender al parto.»» Entonces se giró y miró a los ojos a su nieto «como la noche en que tú naciste» dijo golpeando el pecho del niño con el dedo índice. Lukas se quedó pensativo durante unos minutos mientras el motor seguía vibrando al ralentí. «Dice mamá que ese día nevaba mucho» comentó finalmente. «No te haces una idea» añadió Karl poniendo el coche en marcha lentamente.

Dentro de las múltiples definiciones de las gamas de vehículos de motor, la definición de coupé (o cupé como sentencia el término la RAE) es una de las que sin duda evoca deportividad «a la europea» en contraposición a los Poney Cars o Muscle Cars del otro lado del atlántico. Con el tiempo esta evolución de los coches de caballos «cortados» con dos pasajeros y un cochero con acompañante en el exterior se ha asentado como coche deportivo con dos puertas laterales y normalmente configuración 2+2 para el interior, con dos plazas delanteras y dos traseras más incómodas y sacrificadas por la tiranía de la aerodinámica aplicada a la carrocería.

Modelo analizado Audi A5 Coupé
Motor y acabado 40 TDI 204cv quattro-ultra S tronic
Potencia 204CV
Velocidad máxima 210 Kmh
Aceleración o-100 6,9 s
Largo/ancho/alto 4697/1846/1371 mm
Potencia máxima RPM 204 CV (Motor eléctrico de 2CV)
Par máximo Nm/RPM 400 Nm
Caja de cambios Automático 7 marchas
Web https://www.audi.es/
Precio 62.000 euros (antes de ayudas)

Audi ha sido tradicionalmente un fabricante que ha propuesto para el mercado coupés interesantes, como el veterano Audi Coupé derivado del Audi 80 en los años 80 y en la actualidad entre otros con el Audi A5 que además del coupé propone versiones con carrocería descapotable y Sportback. En cualquier caso y como ocurriera con el Audi 80 el fabricante alemán se ha basado en la plataforma que utiliza para los modelos sedán para ofrecer una carrocería más deportiva con ingredientes igualmente deportivos en el resto de las características del coche sacrificando ciertos aspectos prácticos del vehículo.

Audi Coupé

El caso es que hemos tenido la ocasión de disponer de un Audi A5 coupé para realizar una prueba. La versión que hemos probado es la 40 TDI quattro Stronic con una motorización muy interesante: un motor diesel de 204 caballos y 400 Nm de cifra de par que puede presumir de mostrar en su parabrisas la etiqueta ECO de la DGT gracias a un sistema de hibridación ligera que proporciona un motor eléctrico de dos caballos y 12 voltios. El cambio automático Stronic es de 7 marchas y dispone del sistema de tracción integral quattro de Audi.

La planta del A5 Coupé es realmente aparente, tiene un diseño que combina la deportividad de las líneas de un deportivo de pura raza con ese punto de sobriedad alemana que en este caso no desentona. En el frontal encontramos los dos grupos ópticos delanteros con el diseño poligonal tradicional de la marca alemana combinados con un capó alargado y con relieves marcados para facilitar el flujo del aire pero también el de la mirada que busca esa silueta deportiva.

La gran parrilla exagonal de color negro marca la personalidad de esta parte delantera. Esta calandra está compuesta a su vez de piezas exagonales y luce en el centro el emblema de los cuatro aros y una placa que lo identifica como modelo de tracción total quattro. Más abajo el spoiler delantero acoge una segunda y muy estrecha toma de aire mientras en los laterales dos elementos formados por distintas piezas de plástico negro componen un toque decorativo a la vez que sirven de alojamiento para los pilotos.

Aerodinámica

En el lateral se distingue la sutil línea deportiva que se inclina suavemente hacia arriba en la parte delantera y baja algo más bruscamente en la trasera para completar un perfil aerodinámico que se mantiene más sobrio que agresivo. Las llantas de aleación de 19 pulgadas de cinco radios añaden una pizca más de deportividad mientras que en la parte inferior de la carrocería los flancos se estrechan para ofrecer otro detalle de diseño en pos de la deportividad. En general un aspecto indudablemente deportivo pero sin estridencias.

La cintura del coche se eleva en la parte posterior alargándose hasta el spoiler trasero que marca la parte superior de un gran portón. Sobre este un amplio parabrisas inclinado que continúa el dibujo del techo sin elementos que interrumpan la línea aerodinámica del coche. En esta parte trasera nuevamente los grupos ópticos alargados de diseño reconocible quedan divididos por la apertura del portón en dos partes. Más abajo un generoso parachoques queda por encima de un doble tubo de escape enmarcado por una pieza de plástico negro.

Al interior del A5 Coupé se accede por las dos únicas puertas que dejan un espacio más que holgado para la parte delantera y algo más angosto para el que quiera acceder a la parte trasera abatiendo los asientos. Éstos se desplazan longitudinalmente para dejar más espacio pero aún así se accede con dificultad, aunque comparativamente no es de los deportivos de cuatro plazas en los que sea más difícil hacerlo. En la parte delantera los asientos son excelentes, tanto por el diseño envolvente como por el tacto de los materiales como por el acolchado.

Acabados de calidad

La calidad de los acabados en general es muy alta, tal y como nos tiene acostumbrados la marca en otros modelos que hemos probado. Quizás se echan en falta más guiños a la vocación deportiva del modelo (aunque en las versiones más extremas S y RS están más presentes). Encontramos una pantalla para el sistema de información y entretenimiento de 10,1 pulgadas de muy buena calidad colocada en la parte superior del salpicadero emergiendo del mismo lo cual facilita que no tengamos que bajar la vista si hacemos uso de sus funciones.

En lo que respecta a los indicadores tras el volante también encontramos una pantalla de 12,3 pulgadas que en Audi llaman Virtual Cockpit Plus con una gráfica sencilla y abundante información que podemos ir personalizando con distintas configuraciones. En la consola central colocada entre los asientos encontramos la palanca para el accionamiento del cambio automático con un pomo de tamaño generoso con un diseño ergonómico y un excelente tacto que nos ha gustado mucho, sobre todo en un momento donde es tendencia incluso recurrir a simples botoneras.

Un cosa que nos ha parecido interesante es que a pesar de ser un modelo con aspiraciones deportivas no se ha renunciado a la practicidad, con huecos portaobjetos de buen tamaño, lugar para el teléfono móvil y un diseño de los mandos y botones pensado para que el conductor tenga todo a mano y a la vista. En este sentido también es positivo que los mandos de la climatización sean físicos con unos generosos reguladores para la temperatura y distintos botones para las funciones principales y no tener que acceder al menú correspondiente en la pantalla sin otra alternativa.

Sistema de sonido

Un detalle que también es propio de la marca es el excelente sistema de sonido que se ha encargado a la prestigiosa marca danesa Bang&Olufsen que junto con la excelente insonorización del coche proporciona una experiencia sonora muy buena, con una calidad de sonido apreciablemente mejor de la media incluso con el volumen no demasiado alto. En las plazas posteriores además de la dificultad de acceso propia de este tipo de vehículos, el espacio para las piernas no es malo aunque sí algo peor en altura. En general adecuado para personas hasta de 1,85 metros y algo más justo para personas más altas, sobre todo si los que ocupan las plazas delanteras también tienen cierta estatura.

El maletero de este Audi A5 Coupé es bastante amplio, tiene una capacidad de 450 litros y es posible ampliarlo abatiendo los asientos en tres partes, aunque la capacidad total no figura en la ficha técnica del modelo. Es un espacio aprovechable por ser de formas regulares y no dispone de bolsillos para pequeños objetos y sí de cuatro ganchos en el suelo del maletero que permite utilizar redes o cuerdas para fijar la carga y no se mueva cuando el coche esté en movimiento.

Antes de comentar la prueba dinámica del A5 Coupé hay que tener en cuenta el sistema de propulsión, que como hemos comentado se trata de un motor diésel de 204 caballos que utiliza un motor eléctico como sistema complementario y que dispone de un sistema de cambio automático S Tronic de doble embrague de siete marchas. Se puede decir que es una de las versiones intermedias en cuanto a potencia y prestaciones de este modelo ya que por encima se colocan las versiones S y RS con hasta 450 caballos de potencia.

Suavidad

Una de las primeras impresiones que hemos tenido al conducir este modelo alemán es el de la suavidad. La alta cifra de par del propulsor y el excelente cambio automático (en otros modelos del grupo se denomina DSG) permite dosificar la potencia entregada con el pedal del acelerador con mucho control pudiendo arrancar de forma rápida o más progresiva según necesitemos. No es una entrega de potencia que deslumbre pero sí más que suficiente para aceleraciones decididas. Sobre el papel este modelo puede alcanzar los 100 kilómetros por hora desde parado en 6,9 segundos, una cifra que nos permite calificar esta aceleración como propia de un deportivo.

La conducción en ciudad es por lo tanto agradable. A menos que el motor diésel esté frío, en cuyo caso notaremos algo las vibraciones, el coche es muy silencioso y agradable de conducir, aunque se nota que no es su territorio por visibilidad y maniobrabilidad, aunque en muchos casos son superiores a la media de modelos deportivos que hemos podido probar. Las suspensiones no tienen una dureza que hagan sentir demasiado los baches, sobre todo cuando seleccionamos un modo de conducción normal (Efficiency, Auto o Confort ).

En carretera

Cuando salimos a carretera o autopista el A5 Coupé muestra su personalidad, que no es la de un rabioso deportivo sino más bien la de un gran turismo hecho para equilibrar los grandes trayectos panorámicos con las sensaciones más dinámicas. Precisamente en el modo Dynamic es cuando obtendremos las reacciones más inmediatas tanto en el cambio como en el acelerador y el endurecimiento de las suspensiones. En autopista el confort de marcha es muy bueno, arropados además por un habitáculo con una calidad muy alta como hemos apuntado.

En carreteras viradas es donde podemos poner a prueba el verdadero pedigrí de este Audi. La sensaciones son parecidas a lo que hemos comentado del aspecto del coche, la deportividad está ahí pero con algo de sobriedad. Uno de los detalles que lo indican es por ejemplo la dirección, que no es tan comunicativa ni tan rápida como en otros modelos pero que permite enlazar curvas sin problemas y mantener unos ritmos elevados con una gran seguridad, gracias a la excelente tracción integral que obliga al coche a mantener su compostura en todo momento. Es uno de los ingredientes más sobresalientes del coche sin duda.

Una de las características más llamativas de las prestaciones de este modelo en concreto es el consumo. Incluso cuando se le exigen prestaciones es capaz de mantener el gasto de combustible en límites muy razonables. Se pueden mantener medias por debajo de los siete litros e incluso más bajas si se conduce con parsimonia y no superar los ocho litros aunque busquemos divertirnos con el coche. En ciudad los consumos también son muy buenos para un coche de sus características. Además la etiqueta ECO proporciona muchas ventajas en distintas situaciones de la vida urbana del coche.

Conclusiones

El A5 Coupé es un modelo que combina elementos de deportividad con otros de mucha racionalidad alemana, lo que resultan en un coche realmente único para quien no quiera renunciar a todo en aras del comportamiento dinámico de un coche. Es muy cómodo, tiene unos acabados excelentes pero por otro lado ofrece la posibilidad de una conducción más dinámica si es lo que buscamos. Todo ello con unas emisiones bajo control y un consumo muy razonable en esta versión diésel microhíbrida que hemos probado.

Nos ha encantado el comportamiento de la tracción integral que además de seguridad con poca adherencia permite conducir a ritmo elevado en curva con total confianza. Se trata de un coche que invita a hacer muchos kilómetros sin mucho esfuerzo pero que guarda una reserva de deportividad razonable para cuando queramos sentir el dinamismo que es capaz de proporcionar. Un deportivo muy equilibrado que nos ha parecido un acierto por parte del fabricante alemán.

Valoración final
8.8 NOTA
NOS GUSTA
Estabilidad en curva
Consumos
Confort
A MEJORAR
Plazas traseras
RESUMEN
El Audi A5 coupé es uno de los mejores compromisos que hemos encontrado entre deportividad y coche racional con un excelente confort de marcha y consumos razonables para poder hacer muchos kilómetros sin renunciar a cierto espíritu deportivo
Prestaciones9
Diseño8.5
Consumo8
Confort9.5
Sistema de infoentretenimiento9

 

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