Royole FlexPai: así es el primer smartphone flexible del mundo

CES 2019. El evento tecnológico celebrado en Las Vegas sigue funcionando a plena máquina y ha servido de escenario de gala para presentar el Royole FlexPai, un dispositivo que puede presumir de ser el primer smartphone flexible del mundo.

Ya os adelantamos información sobre este terminal hace un par de meses y hoy por fin hemos podido verlo en acción y confirmar sus especificaciones finales. El Royole FlexPai no solo es el primer smartphone flexible, sino que además encaja dentro de lo que podemos considerar como «tope de gama», ya que la unidad exhibida en el CES 2019 contaba con un SoC Snapdragon 855.

Como podéis ver en las imágenes el Royole FlexPai tiene un diseño que encaja perfectamente con lo que habíamos visto en patentes y diseños conceptuales de varios fabricantes. El terminal se pliega por el centro, donde cuenta con una especie de bisagra especial, y presente una línea que nos recuerda al Galaxy F, nombre provisional que recibe el smartphone flexible que Samsung presentará entre febrero y marzo de este mismo año.

El Royole FlexPai ha sido desarrollado por una empresa especializada en la creación y comercialización de componentes tecnológicos flexibles. Su fundación se produjo en 2012, así que es una compañía relativamente nueva. A continuación os dejamos un listado con todas sus especificaciones:

• Pantalla AMOLED flexible de 7,8″ (extendida) con resolución de 1.920 x 1.440 píxeles.
• SoC Snapdragon 855 con CPU de ocho núcleos y GPU Adreno 640.
• 6 GB-8 GB de RAM.
• 128 GB-256 GB de capacidad de almacenamiento ampliable.
• Cámaras de 16 MP y 20 MP.
• Batería de 3.800 mAh.
• Conector USB Type C.
• Water OS como sistema operativo.
• Precio: 1.300 dólares en su configuración base.

Aunque estamos ante un diseño interesante que cuenta con una pantalla impresionante las primeras valoraciones no son nada positivas. Los chicos de Techradar han tenido la oportunidad de probar este terminal y han destacado que la experiencia de uso es mala por tres grandes razones: el software no está debidamente optimizado, la interfaz es muy lenta y las cámaras tienen un tiempo de respuesta muy pobre.

Todo esto explica, en conjunto, que Royole haya podido adelantarse a Samsung en la carrera por presentar el primer smartphone flexible. Han llegado primero a la meta, pero el resultado es un producto mal terminado y poco optimizado que presenta, además, un diseño mejorable, ya que la bisagra que permite doblar la pantalla no queda en una posición totalmente plana, lo que hace que llevarlo encima sea incómodo.