Apple presenta sus procesadores M2 Pro y M2 Max con el sector profesional en mente

Apple, el gigante de manzana mordida con sede en Cupertino, acaba de presentar sus procesadores M2 Pro y M2 Max con el propósito de elevar todavía más el listón de sus propias computadoras personales, más concretamente el de los modelos MacBook Pro y Mac mini. Una vez más, nos encontramos con SoC basados en la arquitectura ARM, que pretenden aunar potencia a nivel de CPU y GPU junto a una eficiencia presuntamente superior a la de x86 y con soporte para hasta 96GB de memoria unificada.

Profundizando en los detalles, el M2 Pro de Apple amplía la propia arquitectura del modelo original del chip con hasta 12 núcleos a nivel de procesador y hasta 19 núcleos en la GPU junto a una memoria unificada de alta velocidad de hasta 32GB. Por su parte, el chip M2 Max sube todavía más la propuesta con un procesador gráfico de hasta 38 núcleos y un soporte que dobla el ancho de banda de la memoria unificada, que puede alcanzar los 96GB de capacidad. La compañía dice que el rendimiento por vatio líder del M2 Max lo convierten en el procesador más potente y de consumo más eficiente que se haya visto en un portátil profesional.

Pero en los últimos tiempos no solo cuenta el rendimiento “bruto” del procesador y la gráfica, sino también la capacidad para trabajar con la inteligencia artificial, un sector que ha experimentado un gran crecimiento en los últimos tiempos. Aquí, tanto el M2 Pro como el M2 Max incluyen un Neural Engine más rápido de 16 núcleos, mientras que el motor de multimedia ha sido mejorado para alcanzar su mejor versión hasta la fecha.

El Neural Engine introducido en los procesadores M2 Pro y M2 Max es capaz de ejecutar 15,8 billones de operaciones por segundo y alcanzar velocidades hasta un 40% superiores a las logradas por la generación anterior. Una de las áreas en las que entra en acción es la optimización de la calidad de la imagen de la cámara mediante vídeo computacional.

El Apple M2 Pro está fabricado con un proceso de 5 nanómetros de segunda generación e incluye un total de 40.000 millones de transistores, lo que supone, según la compañía, un 20% más que el M1 Pro y el doble que el M2 original. El procesador, que puede contar con diez o doce núcleos que se distribuyen en hasta ocho de alto rendimiento y otros cuatro eficientes, ofrece un desempeño hasta un 20% más rápido en tareas multihilo que el M1 Pro. Aplicaciones como Adobe Photoshop se tendrían que ejecutar con más rapidez que nunca y, según Apple, el IDE Xcode va hasta 2,5 veces más rápido que en el MacBook Pro más potente de los que hay con procesador Intel.

En lo que respecta al procesador gráfico, el del M2 Pro tiene un total de diecinueve núcleos, tres más que el M1 Pro, y tiene una caché de nivel 2 todavía mayor para elevar el desempeño en hasta en un 30%. De esta manera, la experiencia y la potencia en esa faceta debería ser equivalente al de una consola de videojuegos, aunque Apple no ha especificado ningún modelo ni generación.

Por su parte, el Apple M2 Max se hace con el trono de la marca a nivel de rendimiento con sus 67.000 millones de transistores, una cantidad que supone 10.000 millones más que el M1 Max y el doble que el M2 estándar. Sin embargo, posiblemente sea en la memoria donde más sobresale al doblar el ancho de banda del M2 Pro para alcanzar los 400GB/s y al soportar un máximo de 96GB de memoria unificada, por lo que debería de ser capaz de soportar cargas de trabajo superpesadas con una experiencia fluida al usar el sistema. La compañía menciona cosas como excepcionales efectos visuales, entrenamientos de modelos aprendizaje automático y la combinación de varias imágenes de gigapíxeles, tanto conectado a la corriente como tirando de la batería.

El M2 Max cuenta con la misma cantidad de núcleos que el M2 Pro a nivel de procesador, pero a nivel de gráficos es más potente al poder incorporar una caché de nivel 2 aún mayor y hasta 38 núcleos. En consecuencia, el rendimiento gráfico se ha visto aumentado hasta en un 30% en comparación el M1 Max.

Apple dice que “gracias a sus 96 GB de memoria, el nuevo MacBook Pro con M2 Max se ocupa de proyectos de gran carga gráfica que resultan imposibles para otros sistemas de la competencia”. Para ello, y según su versión, ha hecho pruebas con OTOY Octane X 2022.1 y ha comprado dicho MacBook con dos compatibles: uno que incluía un Intel Core i9 como un procesador, una NVIDIA Quadro RTX 6000 con 24 GB de memoria GDDR6 y Windows 11 Pro, y otro con un Intel Core i9, una NVIDIA GeForce RTX 3080 Ti con 16 GB de memoria GDDR6 y la última versión de Windows 11 Home.

Otra característica de los procesadores de Apple es un motor de multimedia avanzado con aceleración para formatos como H.264 y HEVC y renderización (codificación) y reproducción (decodificación) de vídeo ProRes, que permite reproducir varias secuencias de vídeo a 4K y 8K con un consumo ajustado. Aquí es importante resaltar que el M2 Max tiene dos motores de renderización de vídeo y dos motores ProRes, por lo que debería renderizar vídeos el doble de rápido que el M2 Pro. Con el fin de mejorar la seguridad está la última generación de Secure Enclave, un componente clave para la seguridad de primer nivel ofrecida por Apple.

Como vemos, Apple parece que está decidida a apostar fuerte por el mercado profesional con sus nuevos procesadores M2 Pro y M2 Max, aunque al final los equipos que los incluyan podrán ser comprados por cualquiera que pague el precio. Mientras Windows siga sin funcionar como debe en ARM, Apple seguirá posicionándose aparentemente como la compañía que tiene un mayor margen de crecimiento en el sector de los portátiles, y es que sus procesadores ARM han sido un soplo de aire fresco que el sector necesitaba como el comer.