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Por qué las tarjetas de memoria siguen siendo tan útiles para varias tareas

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Las tarjetas de memoria externas siguen siendo de gran utilidad y no solo para aumentar la capacidad del almacenamiento interno de un dispositivo, ya que también se usan para ejecutar aplicaciones o sistemas operativos completos. En este grupo destacan las MicroSD por su tamaño compacto y a ellas vamos a dedicar esta guía donde detallaremos todas las características que un usuario debe conocer, terminando con una selección de las mejores ofertas disponibles.

Los estándares modernos de tarjetas de memoria nacieron hace dos décadas de la necesidad de superar el caos de formatos cerrados e incompatibles entre sí que proliferaban en aquellos momentos. Fueron normalizados por el grupo industrial SDA bajo el estándar Secure Digital tras un desarrollo inicial del fabricante SanDisk. Fue todo un acierto porque estos componentes han sido de una utilidad enorme.

Aunque una parte de fabricantes de móviles han reducido su soporte, siguen siendo un grupo de producto imprescindible para aumentar la capacidad de almacenamiento de centenares de millones de dispositivos (móviles soportados, tablets, cámaras fotográficas, drones, GPS o consolas portátiles), además de ser el medio imprescindible para ejecutar sistemas operativos en computadoras de placa única como las Raspberry Pi o para ejecutar apps Android y así liberar espacio en tu smartphone.

Tarjetas de memoria MicroSD

Son las más pequeñas en tamaño entre todas las SD, con unas dimensiones extremadamente reducidas de 15×11×1 mm, un área de 165 mm2 y un peso prácticamente despreciable. Seguramente su tamaño ha sido clave para aumentar su adopción. Y su versatilidad, enorme, ya que pueden usarse directamente en los dispositivos que tengan soporte para ellas, mediante adaptadores internos SD y también en otros externos, por ejemplo al usar pendrives especiales que cuenta con lectores microSD y se conectan a puertos USB.

Aunque externamente las tarjetas microSD son idénticas, hay una gran diferencia entre ellas y no solo en capacidad de almacenamiento. Como ocurre con otros estándares (véase USB o Wi-Fi) sus responsables han ido añadiendo un gran número de características que conviene conocer. Las vamos a repasar todas porque pueden ser un auténtico galimatías para el gran público.

Formato

Es la división principal de estas tarjetas. Hay tres, aunque realmente la única que hay que valorar es la tercera, hoy soportada por todos los dispositivos nuevos:

  • microSD: La más antigua. Tienen una capacidad de hasta 2 Gbytes y se pueden utilizar en cualquier ranura microSD.
  • microSDHC: Tienen una capacidad desde los 2 hasta los 32 GB y se pueden utilizar en dispositivos que soporten SDHC y SDXC.
  • microSDXC: Son las más modernas y la única referencia de compra actualmente. Su capacidad va desde los 32 Gbytes hasta los 2 Tbytes, el máximo soportado hasta ahora, si bien el nuevo formato SD Express del que hablaremos después lo ampliará enormemente.

Clase

El ecosistema de tarjetas de memoria microSD es tan enorme que a la hora de elegir la tarjeta también tenemos que tener en cuenta que el rendimiento sea suficiente para el uso al que vamos a destinarla. Esta «Clase» define la velocidad mínima en Megabytes por segundo que en modo de escritura es capaz de soportar la tarjeta. La velocidad mínima en escritura soportada de cada clase es:

  • Clase 2: Al menos 2 MBps.
  • Clase 4: Al menos 4 MBps.
  • Clase 6: Al menos 6 MBps.
  • Clase 10: Al menos 10 MBps.

Rendimiento Máximo – Mínimo

Se trata de la velocidad máxima y mínima que en transferencia de datos pueden alcanzar las microSD y se han ido ampliando desde las originales para cubrir las necesidades de nuevas aplicaciones como la grabación 4K. A tener en cuenta los siguientes apartados:

La velocidad máxima en lectura (secuencial) que soporta una tarjeta se define con la especificación Ultra High Speed (UHS) y cuenta con dos versiones:

  • UHS-I, con velocidades de bus de hasta 104 Mbps
  • UHS-II con velocidades de bus de hasta 312 Mbps

La velocidad mínima en escritura (secuencial) soportada se define aparte, con los números 1 o 3 inserto en una U y con dos versiones:

  • U1: Al menos 10 MBps.
  • U3: Al menos 30 MBps.

El rendimiento aleatorio también está definida en la norma y se ofrecen en dos versiones:

  • A1: la original
  • A2:  nueva especificación que cuadriplica el mínimo en lecturas/escrituras aleatorias (4.000/2.000 IOPS) de la anterior.

Velocidad nominal. No te vayas… que hay más. La mayoría de fabricantes citan la velocidad nominal de su tarjeta y es la máxima que en modo lectura son capaces de alcanzar, expresándose en MB/s.

Velocidad relativa. Se corresponde con el aumento de velocidad de transferencia original del formato CD (150 KBps). Así, puedes ver algo como “2x”, 4x” y así sucesivamente. Una “100x” correspondería a una velocidad de 15 MBps.

Estas dos últimas características no están normalizadas, solo las usan algunos fabricantes y (afortunadamente) están desapareciendo, pero por si te las encuentras para saber lo que significan. El resto de especificaciones sí se suelen incluir y las verás impresas en las mismas tarjetas, en el envoltorio donde se venden y en la página web del producto.

SD Express: un nuevo nivel

Es una nueva especificación del estándar Secure Digital que ha llevado a este formato a otro nivel en rendimiento y capacidad. Para ello, las SD Express usan la interfaz PCIe 3.0 y el protocolo NVMe v1.3, los mismos que emplean otros productos de almacenamiento como las SSD. Bajo PCIe, una SD Express alcanza un rendimiento en transferencia de datos que se acercará a lo que ofrecen las tarjetas extraíbles más rápidas, las Compact Flash que por precio se limitan al mercado profesional de cámaras fotográficas.

Además de la mejora de rendimiento también aumentará la capacidad de almacenamiento y potencialmente alcanzará 128 Tbytes. Una auténtica barbaridad para unas tarjetas SD Express que se ofrecerán inicialmente en formatos SDUC, SDXC y SDHC. SDA ha seguido trabajando en esta norma y ya está anunciada la versión 8 con soporte para dos carriles PCIe con una fila adicional de contactos y tasas de transferencia PCIe 4.0 para un ancho de banda que desde los 985 MB/s iniciales crecerá hasta un máximo de 3938 MB/s.

El bus «Express» también estará disponible para las microSD que nos ocupa en esta guía. Aunque no alcanzará el rendimiento de las SD más grandes, la velocidad del bus permitirá ofrece velocidades de lectura de 624 Mbytes por segundo. Estas SD Express podrán usarse en tareas avanzadas de fotografía y vídeo (manejo de resoluciones 8K y capturas RAW) hasta ahora reservadas a la mencionadas Compact Flash. En cuanto al almacenamiento de datos y ejecución de software (lo más usado en consumo) su aumento de nivel será estratosférico. Esperemos que lleguen pronto al mercado.

Cómo elegir la tarjeta

La capacidad será seguramente la primera cuestión a valorar, que no la única. Si tu dispositivo lo soporta el mínimo lo pondríamos en 32 Gbytes. De ahí, hasta superar la barrera del Tbyte tienes un amplio rango donde elegir.

En cuanto al rendimiento, dependerá muchísimo del dispositivo donde lo vayas a utilizar. No tiene nada que ver un GPS donde únicamente necesitamos extender el almacenamiento interno y poco más, que si lo utilizamos para ejecutar aplicaciones desde un smartphone o un sistema operativo como en una Raspberry Pi donde sí necesitaremos más rendimiento. Si las usamos en cámaras fotográficas para RAW o 4K ahí tendrás que comprar las más rápidas del mercado.

Señalar también el grupo de tarjetas «resistentes». Están especialmente dedicadas a profesionales o usuarios que necesiten tarjetas de memoria de alta durabilidad y la máxima resistencia, protección contra el agua, el polvo o los rayos X de centros de transporte, además de incluir software de recuperación de datos.

No te vas a equivocar. Todos los grandes proveedores ofrecen una gran fiabilidad, velocidades superiores al mínimo establecido y buen soporte, hasta garantía de por vida en los mejores modelos. Casi todas suelen incluir un adaptador para utilizarlas en ranuras SD y se pueden conectar a puertos USB con el correspondiente adaptador.

Tarjetas de memoria MicroSD (Precios marzo 2023)

Con todo lo anterior en mente nos vamos de compras. Hay que decir que como el resto de productos basados en memorias flash NAND el precio por GB ha bajado mucho los últimos años y si no necesitas demasiada capacidad hay oferta por solo unos cuantos euros. De manera general, las versiones de 64, 128 y 256 GB son las más rentables en precio por GB. Si tu dispositivo lo soporta, serían la elección preferente. Te dejamos con una selección de ofertas actuales.

Kioxia Exceria. La antigua marca de memorias de Toshiba comercializa estas tarjetas MicroSDXC UHS-I, U1 de hasta 100 MB/s con las siguientes capacidades y precios:

  • 64 GB por 7 euros.
  • 128 GB por 16 euros.
  • 256 GB por 36 euros.

SanDisk Ultra. Tarjetas microSDHC con velocidad de lectura de hasta 120 MB/s. Clase 10, U1 y A1, incluyen un adaptador para SD y se distribuye con las siguientes versiones y precios:

  • 256 GB por 32 euros.
  • 512 GB por 63 euros.
  • 1 TB por 143 euros.

Samsung EVO Select. Tarjetas MicroSDXC UHS-I, Clase 10, U1 de hasta 130 MB/s. Son resistentes y se vende con adaptador SD en las siguientes versiones y precios:

  • 64 GB por 10 euros.
  • 128 GB por 18 euros.
  • 256 GB por 29 euros
  • 512 GB por 55 euros.

Kingston Canvas Select Plus. Tarjetas MicroSDXC UHS-I, Clase 10, U3, A1 de hasta 100 MB/s. Son resistentes a golpes, vibraciones y prueba de rayos X. Se vende con adaptador SD en las siguientes versiones y precios:

  • 64 GB por 5 euros.
  • 128 GB por 10 euros.
  • 256 GB por 21 euros.
  • 512 GB por 45 euros.

Lexar Play. Tarjetas MicroSDXC UHS-I, Clase 10, de hasta 150 MB/s. Se vende con adaptador SD en las siguientes versiones y precios:

  • 128 GB por 14 euros.
  • 256 GB por 28 euros.
  • 512 GB por 66 euros.
  • 1 TB por 159 euros.

Kioxia Exceria Plus. MicroSDXC UHS-I, Speed Class U3 (V30) para la grabación y reproducción de vídeo 4K con velocidades de lectura de hasta 100 MB/s y escritura de hasta 85 MB/s.

  • 32 GB por 13 euros.
  • 64 GB por 20 euros.
  • 128 GB por 26 euros.
  • 256 GB por 48 euros.

Samsung EVO Plus. Tarjetas de memoria MicroSDXC UHS-I, A2, clase 10 de hasta 130 MB/s. Son resistentes contra el agua, temperatura o rayos X, y se venden con adaptador en las siguientes versiones y precios:

  • 64 GB por 13 euros.
  • 256 GB por 30 euros.
  • 512 GB por 56 euros.

SanDisk Extreme PRO. Unas microSDXC Clase 10, U3, V30 y A2 con transferencia de datos en lectura de hasta 170 MB/s y 90 MB/s en escritura. Son resistentes a temperaturas, al agua, a golpes y a rayos X. Se comercializan con / sin adaptador SD:

  • 64 GB por 22 euros.
  • 128 GB por 36 euros.
  • 256 GB por 57 euros.
  • 512 GB por 104 euros.
  • 1 TB por 202 euros.

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Nota: Esta selección contiene enlaces de nuestros afiliados, pero ninguno de los productos incluidos han sido propuestos o recomendados por ellos o sus fabricantes, sino elegidos según nuestro propio criterio.

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