Estados Unidos quiere que Sony muestre acuerdos que impidieron la llegada de juegos a Game Pass

Parecía que Sony estaba logrando imponer su postura con las presiones que está ejerciendo para evitar la compra de Activision-Blizzard por parte de Microsoft, sin embargo, parece que al gigante japonés se le están torciendo poco a poco las cosas. La Unión Europea, al menos ahora, apunta más hacia la aprobación de la operación, mientras que la demanda que la FTC estadounidense interpuso contra Microsoft podría forzar a Sony a tener que revelar las exclusividades mediante acuerdo y los posibles pagos que ha podido realizar para evitar la aparición de juegos en el servicio Game Pass.

Si bien la FTC interpuso una demanda para evitar la adquisición de Activision-Blizzard por parte de Microsoft, eso no es incompatible con el hecho de que el organismo antimonopolio estadounidense haya iniciado, dentro de la investigación, un proceso de descubrimiento legal junto a la responsable de Xbox para citar a Sony. La intención de Microsoft y la FTC es forzar a Sony para que revele registros, documentación interna y correos electrónicos sobre la división PlayStation.

Profundizando en el giro de la FTC, el juez administrativo principal del organismo, D. Michael Chappell, se ha puesto del lado de la solicitud de Microsoft para descubrir detalles sobre acuerdos de exclusividad realizados por Sony para PlayStation o que habrían beneficiado a la división. La solicitud cubre acuerdos realizados después del 1 de octubre de 2019 que presuntamente impidieron a editores publicar videojuegos en el servicio Xbox Game Pass. La decisión del juez llegó después de que Microsoft acusara previamente a Sony de pagar “derechos de bloqueo” para evitar la adición de contenidos al mencionado Game Pass.

La intención de Microsoft era pedir a Sony todos los acuerdos a los que ha llegado desde el año 2012, pero el juez de la FTC vio excesiva la petición y ha recortado la franja de tiempo para que comience en el año 2019. Lo normal es que los acuerdos de exclusividad que Microsoft quiere que se revelen permanezcan fuera de la luz pública, pero la causa entre Epic Games y Apple obligó en su momento a mostrar ciertas cosas que para las compañías deberían de haberse mantenido en secreto.

Por ahora la causa emprendida por la FTC se encuentra en la etapa de descubrimiento de documentos, con una audiencia probatoria que está programada para el 2 de agosto de 2023. Es posible que se descubran nuevos detalles antes de la llegada de dicha fecha, y viendo el giro que está tomando la causa, posiblemente más de uno de esos nuevos detalles muestren cosas que erosionen la postura de Sony.

Como ya hemos dicho, parecía que Sony las tenía todas consigo para evitar que se consumiera la operación, pero Microsoft ha sabido leer mejor la situación que los propios reguladores y ha maniobrado para que los vientos ahora soplen más a su favor. Si bien el gigante de Redmond ya tiene el visto bueno de algunos reguladores, la última palabra la tienen aparentemente los reguladores de Estados Unidos (FTC), Reino Unido (CMA) y la Unión Europea. Si Microsoft vence en esos tres frentes, podrá completar con casi toda probabilidad la absorción de Activision-Blizzard.