Nuestros lectores hablan: Estados Unidos y el caso Huawei

Estados Unidos ha llevado la guerra comercial que libra con China a otro nivel, y lo ha hecho utilizando a Huawei como «cabeza de turco». No se trata de un rumor, y tampoco de una simple intuición, es lo que podemos interpretar de las últimas declaraciones de Donald Trump, quien ha dicho textualmente:

«Huawei es muy peligrosa. Miras lo que han hecho desde un punto de vista de seguridad, desde un punto de vista militar, y ves que es muy peligroso. Con todo, es posible que Huawei se incluya en algún tipo de acuerdo comercial. Si hiciéramos un trato, podría imaginarme que Huawei posiblemente estaría incluido de alguna forma, como parte de un acuerdo comercial«.

Tenemos otro argumento vago y carente de sentido que, además, se contradice de una manera flagrante. Si Huawei es tan peligrosa, cosa que se ha probado en ningún momento, ¿por qué te planteas darle una oportunidad si va acompañada de un acuerdo comercial? ¿Dejaría de ser un peligro de forma automática? No hay duda, el gigante chino es un damnificado más de la política de Trump.

La presión sobre Huawei se ha intensificado durante los últimos días, tanto que ha salido de Estados Unidos y ha acabado afectando a otras empresas internacionales, incluidos nombres tan importantes como ARM (británica) y Toshiba (japonesa). En lo personal estoy convencido de que al final habrá un acuerdo y que la cosa no irá a más, al fin y al cabo un bloqueo de este nivel hace daño a todas las partes implicadas, incluido Estados Unidos, pero creo que también es un importante toque de atención para China.

Cuando se produjo el caso ZTE muchos ejecutivos del país hicieron hincapié en que China debía reducir la dependencia de sus empresas tecnológicas de componentes y herramientas de software extranjeras, e invitaron a potenciar la inversión para mejorar esta situación.

Hoy podemos confirmar que su idea estaba totalmente justificada, ya que una «pataleta» de Trump ha bastado para poner contra las cuerdas, y sin ningún tipo de base, a Huawei. Todavía no tenemos claro qué medidas tomará China para responder a Estados Unidos, pero como vimos en este artículo tienen más de un as bajo la manga.

Por otro lado podríamos traer a colación la campaña de espionaje masivo a nivel internacional que llevó a cabo Estados Unidos, un movimiento que al final no tuvo ningún tipo de consecuencias para el país, pero que de haber sido realizado por otra nación podría haber desembocado en graves sanciones y bloqueos comerciales. Un ejemplo claro de la doble vara de medir que impera en el mundo.

No me extiendo más, ya que lo importante en este artículo es vuestra opinión sobre la campaña de acoso y derribo que ha emprendido Estados Unidos contra Huawei. Los comentarios son vuestros.