Blue Origin agota la vía judicial, y parece aceptarlo
Parece que el culebrón de estos últimos meses, protagonizado por Blue Origin y en el que, pese a que no querrían haberlo hecho, también han participado SpaceX y la agencia espacial estadounidense, podría estar a punto de finalizar. Y lo que es mejor todavía, parece que la compañía habría decidido encajar el golpe y seguir adelante, en vez de mantenerse en una senda judicial que, visto con un poco de perspectiva, no parece beneficiar absolutamente a nadie. En tiempos en los que se ha popularizado eso de win-win-win, esto sería un lose-lose-lose.
Todo esto se remonta al momento en el que la NASA abre un concurso para seleccionar una empresa que fuera capaz de crear un vehículo espacial, capaz de despegar desde la Tierra, volar hasta la Luna, aterrizar en la misma y ser capaz de retornar a nuestro planeta. Todo esto, claro, para el programa tripulado con el que Estados Unidos pretende volver a la Luna esta década, como primer paso para el más que ambicioso plan de llevar a ser humano a la superficie de Marte en algún momento de la década que viene.
A ese concurso se presentaron entre otras, SpaceX y Blue Origin, enfrentando así a dos de los multimillonarios más mediáticos de la actualidad, Elon Musk y Jeff Bezos. Así, de alguna manera, este concurso se convertía también en una lucha de egos, algo que nunca resulta positivo en estas circunstancias. Pero más allá de eso, ambas empresas se jugaban mucho, tanto en prestigio, por supuesto, como en el plano económico, algo importante para SpaceX, pero todavía más para Blue Origin.
La NASA se reservaba el derecho de elegir a más de una de las compañías aspirantes en el concurso, lo que fue interpretado erróneamente por las mismas como que finalmente se elegiría (y financiaría, claro) a dos de ellas. La sorpresa se produjo cuando, finalmente, solo SpaceX fue elegida para en el concurso. Algo que pilló totalmente por sorpresa a Blue Origin, que sin duda esperaba ser una de las dos elegidas por la agencia espacial.
A partir de ese momento, Blue Origin y Jeff Bezos entraron en una espiral que, sin duda, ha dejado bastante mella en la imagen de la compañía, y que originó un rifirrafe bastante desagradable entre Bezos y Musk, cuyos ecos todavía resuenan. Pero lo peor, sin duda, es que las acciones judiciales llevabas a cabo por Blue Origin han retrasado los trabajos de SpaceX, lo que podría traducirse en retrasos en la vuelta del hombre a la Luna. Esta es, sin duda, la peor parte de todo.
Sin embargo la senda judicial parece haber llegado a su fin y, para alegría de todos, Jeff Bezos parece haberlo aceptado y estar ya mirando al frente, con nuevos planes para su compañía. Y es que, según podemos saber por un tweet del propio Bezos, la Corte de Reclamaciones Federales ha desestimado la demanda interpuesta por Blue Origin. La reacción del empresario la encontramos en el propio tweet:
«No es la decisión que queríamos, pero respetamos el juicio de la corte y deseamos pleno éxito para la NASA y SpaceX en el contrato.»